Las cejas son diferencias de planeidad entre baldosas contiguas que pueden dar lugar a roturas de las mismas, así como tropiezos y caídas de los usuarios del pavimento.
Las cejas pueden ser de colocación (producidas por una falta de planeidad a la hora de colocar las piezas) o cejas por despegues o fallos en la adherencia al material soporte.
La realización del acabado superficial in situ, posteriormente a la colocación puede ser un buen método para eliminar las posibles cejas, siempre que la situación del pavimento lo permita.